10-28-2014, 08:20 PM
Acabo de traerme a casa una seven fifty del 93 en muy buen estado.
Os paso primeras impresiones tras un viaje de vuelta de 400km por autopista principalmente.
1.- es un coñazo ir por autopista
2.- es un coñazo ir por autopista
3.- una vez constatados los 2 primeros puntos paso a resumiros el resto de impresiones
He cogido un desvio hacia una autopista alemana donde, ya sin limites de velocidad, he buscado la velocidad de crucero más cómoda. A 6k vueltas va a 150 con el motor muy tranquilo, sin vibraciones y fuerza de sobra pero la posición, excesivamente erguida, castiga las cervicales. He mantenido una media de 140 y la he llegado a poner a 160. No he querido estrujarla mas hasta que no nos conozcamos mejor, ademas los neumaticos, aunque bien de dibujo, tienen 9 años!
La postura de conducción es muy buena, al menos para la media de altura media de los españolitos del baby boom (1.70), imagino q si pasas de 1.80 las rodillas irian demasiado dobladas. Las manos caen de forma natural en el manillar y los mandos son bastante ergonomicos. El asiento es comodo y pemite viajar unos cuantos km sin problema, de altura me viene un poco justo ya que al ser ancho no me permite llegar al suelo con la planta entera de los dos pies pero no supone un problema salvo moviendo la moto en parado, donde se notan sus 235kg con deposito lleno.
La sensación es de ir sobre la moto más que dentro de ella, muy al estilo clásico de las viejas bicilíndricas inglesas y las boxer teutonas. Una vez en marcha se nota ligera y con empuje de sobra. La suspensión es muy suave lo que la hace muy confortable salvo cuando clavas el freno delantero, entonces se hunde demasiado. El ruido solo se oye cuando sales desde parado, luego parece un motor eléctrico, no le vendría mal una banda sonora un poco mas ronca.
El cambio es automático, metes quinta y te olvidas del resto de las marchas! además tiene un buen par...de frenos. El embrague, si usas la moto en modo manual, es de mantequilla sobre todo comparado con mi anterior 500 four.
Como nunca he llevado una zephyr solo puedo compararlas a nivel estético. La zephyr tiene el depósito más redondo y la moto es más compacta lo que la hace más clásica en mi opinión. Pero la seven fifty al natural gana mucho, aunque un poco larga, es bastante proporcionada y la linea del depósito le queda muy bien. Los dos motores tetra y sus escapes son muy parecidos esteticamente , quizás le sobra altura a las tapas de balancines de la seven fifty, parecen castillos.
Mi seven fifty esta pintada en negro con una raya dorada longitudinal. Sólo me falta cortar el subchasis trasero, poner un asiento nuevo, amortiguadores, colin, filtros directos, semimanillares y voila, habemus cafe racer, pero prefiero dejarla como esta por ahora. (mandaria fotos pero no se como hacerlo).
En definitiva he hecho mis primeros 400 Km casi sin enterame y este fin de semana espero meterle otros 400 al menos, pero por carretera de montaña!
No es una zephyr pero me gusta mucho!
Os paso primeras impresiones tras un viaje de vuelta de 400km por autopista principalmente.
1.- es un coñazo ir por autopista
2.- es un coñazo ir por autopista
3.- una vez constatados los 2 primeros puntos paso a resumiros el resto de impresiones
He cogido un desvio hacia una autopista alemana donde, ya sin limites de velocidad, he buscado la velocidad de crucero más cómoda. A 6k vueltas va a 150 con el motor muy tranquilo, sin vibraciones y fuerza de sobra pero la posición, excesivamente erguida, castiga las cervicales. He mantenido una media de 140 y la he llegado a poner a 160. No he querido estrujarla mas hasta que no nos conozcamos mejor, ademas los neumaticos, aunque bien de dibujo, tienen 9 años!
La postura de conducción es muy buena, al menos para la media de altura media de los españolitos del baby boom (1.70), imagino q si pasas de 1.80 las rodillas irian demasiado dobladas. Las manos caen de forma natural en el manillar y los mandos son bastante ergonomicos. El asiento es comodo y pemite viajar unos cuantos km sin problema, de altura me viene un poco justo ya que al ser ancho no me permite llegar al suelo con la planta entera de los dos pies pero no supone un problema salvo moviendo la moto en parado, donde se notan sus 235kg con deposito lleno.
La sensación es de ir sobre la moto más que dentro de ella, muy al estilo clásico de las viejas bicilíndricas inglesas y las boxer teutonas. Una vez en marcha se nota ligera y con empuje de sobra. La suspensión es muy suave lo que la hace muy confortable salvo cuando clavas el freno delantero, entonces se hunde demasiado. El ruido solo se oye cuando sales desde parado, luego parece un motor eléctrico, no le vendría mal una banda sonora un poco mas ronca.
El cambio es automático, metes quinta y te olvidas del resto de las marchas! además tiene un buen par...de frenos. El embrague, si usas la moto en modo manual, es de mantequilla sobre todo comparado con mi anterior 500 four.
Como nunca he llevado una zephyr solo puedo compararlas a nivel estético. La zephyr tiene el depósito más redondo y la moto es más compacta lo que la hace más clásica en mi opinión. Pero la seven fifty al natural gana mucho, aunque un poco larga, es bastante proporcionada y la linea del depósito le queda muy bien. Los dos motores tetra y sus escapes son muy parecidos esteticamente , quizás le sobra altura a las tapas de balancines de la seven fifty, parecen castillos.
Mi seven fifty esta pintada en negro con una raya dorada longitudinal. Sólo me falta cortar el subchasis trasero, poner un asiento nuevo, amortiguadores, colin, filtros directos, semimanillares y voila, habemus cafe racer, pero prefiero dejarla como esta por ahora. (mandaria fotos pero no se como hacerlo).
En definitiva he hecho mis primeros 400 Km casi sin enterame y este fin de semana espero meterle otros 400 al menos, pero por carretera de montaña!
No es una zephyr pero me gusta mucho!